A medida que los niños van creciendo adquieren unas determinadas habilidades. Muchas de ellas se relacionan con el nivel de madurez que tenga el niño, así como del desarrollo de su cerebro.
Sin embargo, cuando hablamos del comportamiento del niño, la cosa puede ser más complicada. Y es que saber cómo comportarse en casa, o en el colegio es el resultado de una interacción complicada entre desarrollo físico e intelectual, de su carácter, la relación que tiene con los progenitores, con los docentes, con sus cuidadores…
Problemas de conducta infantil más comunes
Existen algunos problemas de desarrollo y comportamiento que pueden llegar a ser terriblemente molestos, afectando a las relaciones normales entre el niño y su entorno, o que puedan afectar a su desarrollo emocional, intelectual y social.
Hay algunos trastornos que podrían llegar a ser leves y tener una solución relativamente rápida. Sin embargo, hay otros trastornos que requieren de un tratamiento más prolongado, como es el caso no saber adaptarse a sitios como colegios, a ser rebeldes, o a padecer otro tipo de trastornos (cómo puede ser el trastorno de déficit de atención/hiperactividad TDAH)
La gran mayoría de los mismos vienen derivados de ciertos hábitos que los niños adquieren en su desarrollo normal. El objetivo del tratamiento es hacer un cambio de estos hábitos no deseados, consiguiendo que el niño cambie su comportamiento.
Características del perfil de niño con problemas de conducta
Estas características podrían indicar que un niño tiene problemas de conducta, pero sería crucial ponerse en contacto con un experto para que se encargue de hacer la valoración y el diagnóstico si procediese.
- Dificultad para organizar sus tareas.
- Sensación de que no es capaz de conseguir sus objetivos.
- Tendencia a expresar la primera idea que se le pasa por su mente, sin tener la oportunidad de expresarlo, o si el comentario no es apropiado.
- Facilidad para distraerse y problemas para mantener la atención.
- Es posible que quiera hacer muchas cosas a la vez, sin ni tan siquiera haber terminado las anteriores.
- Tiene dificultad para esperar.
- Cambios en su estado de ánimo en la actitud.
- Problemas de autoestima, relación estrecha de rechazo con su entorno.
- Inseguridad.
- Suelen tener predisposición para caer en ciertas adicciones.
¿Cuándo debemos acudir al psicólogo infantil?
Los síntomas anteriores no indican que un niño pueda tener algún trastorno, pero sería interesante acudir al experto para salir de dudas. Los padres deben observar si la conducta, la convivencia y la capacidad de aprendizaje del niño no es igual a la de otros niños. Si este fuera el caso, es posible que su caso requiera de asistencia psiquiátrica o psicológica. Las malas elecciones podrían convertirse en un hábito, y es que los niños con problemas de conducta están más predispuestos a fracasar en la escuela y a desarrollar determinados problemas mentales.
Las dificultades en el desarrollo mental de un niño suelen tener más de una causa: puede ser dinámica familiar, relaciones, las altas exigencias en el entorno escolar, etc.
Por ello, se necesita la precisa evaluación de un psicólogo para poder establecer si hay trastorno, establecer un diagnóstico y empezar con el tratamiento lo antes posible.