Para que una relación funcione, ¿es suficiente con el amor? Por desgracia, algunas personas que pasan por mi consulta vienen ya muy quemadas con su relación, ya no se comprenden, se pasan el día a la defensiva y la comunicación es nefasta. Cuando les pregunto cuáles son sus motivos para continuar con su relación la mayoría me responden lo mismo: porque le/la quiero. Indago, indago e indago y nos damos cuenta de que no rompen con la relación por miedo a hacer daño, por miedo a la soledad o por no generar más conflicto. Lo que está ocurriendo en estas relaciones es que no se están cubriendo sus necesidades relacionales, porque, spoiler, con el amor, no basta.
Hoy quiero hablar de las necesidades dentro de una relación, algo que se nos suele olvidar porque tenemos muy interiorizada la ridícula idea de que si de verdad quieres a alguien lo demás todo fluye. Esto es mentira, y aunque voy a enfocar las necesidades en las relaciones románticas, lo cierto es que puedes ver necesidades en cualquier tipo de relación. Voy a ello.
¿Qué son las necesidades relacionales y qué pasa cuando no son cubiertas?
Cuando hablo de necesidades relacionales me refiero a las necesidades que se han de cubrir para estar a gusto en una relación. Según Erskine, son componentes clave que se han de dar en una relación para que las personas que componen esta se desarrollen y encuentren bienestar emocional.
Esto se traduce en qué tiene que ocurrir en tu relación para que estés a gusto emocionalmente y la vivas con paz y satisfacción. Por ejemplo, si para ti es importante que haya comunicación con tu pareja, y tu pareja es una persona, por lo general, callada, y que no comparte sus opiniones o sentimientos, esa necesidad no está siendo cubierta.
Lo primero que debemos tener claro es que, en todo vínculo, existen necesidades relacionales o necesidades afectivas. Como decía, con el amor y el quererse no es suficiente para que una relación funcione. Se tienen que cubrir unas necesidades afectivas. Erskine, hablaba de necesidades tales como la seguridad, la aceptación, la validación, el impacto, la iniciativa, la reciprocidad o el tiempo. Cuando esas necesidades no son compatibles, porque, aunque se pidan, la otra parte no las puede cubrir, es muy probable que dentro de la relación se sienta malestar y vacío.
Otra característica muy importante de las necesidades relacionales es que todas las necesidades son válidas. Esto quiere decir que, cada persona, tiene derecho a tener unas necesidades, sean cuales sean. Si, por ejemplo, tu pareja necesite pasar más tiempo contigo y tú no lo necesites tanto no significa que tu pareja tenga una necesidad que no debería tener o que hay algo mal en ella si necesita más tiempo solo porque tú no lo necesites.
En definitiva, a una de las partes le puede parecer que lo que la otra persona le pide es injusto o que es exagerado. Sin embargo, todas las necesidades son legítimas y están ahí por algo, con lo cual deben ser aceptadas.
Por otro lado, aceptadas no significa que las tengamos que cubrir a toda costa. Como pareja, es mi responsabilidad cuidar de que las necesidades de la persona con la que estoy estén más o menos cubiertas. Sin embargo, esto no siempre es posible de cumplir. Es, entonces, cuando tenemos que valorar si la relación es compatible o no, por mucho que queramos a esa persona. Al mismo tiempo, también es responsabilidad de cada cual saber o aprender a comunicarlas. No podemos pretender que nuestra pareja adivine cuáles son.
Por último, que mi vínculo no satisfaga mis necesidades afectivas no es porque sea mala persona, es porque no quiere, o más probablemente, no pueda. Cada cual tenemos una historia de vida que nos ha influido en cómo nos relacionamos, las expectativas que tenemos sobre las relaciones y en lo que necesitamos sí o sí de nuestros vínculos.
En conclusión…
Podemos necesitar apoyo, comprensión, proximidad, complicidad, intimidad, compartir, reconocimiento, confianza, honestidad, comunicación, etc. Las necesidades se vuelven incompatibles cuando cubrir una necesidad tuya me hace a mí descuidar mis necesidades o cuando, por más que comunico una necesidad la otra parte no puede satisfacerla.
Para que una relación sea sana tenemos que valorar si las necesidades que tengo son lo suficientemente importantes para mí y que deben estar cubiertas por esa persona sí o sí o si puedo aceptar que esa persona no me las va a dar y las puedo obtener de otros vínculos.
¿Buscas terapia individual o terapia de pareja?
Si estás teniendo problemas de pareja o, sientes que algo no va bien en tus vínculos, tanto en la terapia individual como la de pareja, hablo, pregunto e insisto en la importancia de las necesidades relacionales. Estas no son siempre de identificar y validar para una misma y, para ello, a veces, es necesario pedir ayuda de una psicóloga. Si quieres puedes contactar conmigo aquí.
Referencias bibliográficas
Erskine, R. G., Moursund, J. P., & Trautmann, R. L. (2012). Más allá de la empatía. Una terapia de contacto en la relación (N. Maestre, Trad.). Descleé de Brouwer.(Trabajo original publicado en 1999).
Levine, A., & Heller, R. (2016). Maneras de amar: La nueva ciencia del apego adulto y cómo puede ayudarte a encontrar el amor… y conservarlo. Urano.
O’Reilly-Knapp, M., & Erskine, R. G. (2010). Análisis Transaccional Integrativo. Conceptos Centrales. ANALISIS TRANSACCIONAL y PSICOLOGIA HUMANISTA, 33(2), 317.