¿Sabías que el mar puede ayudarte?
Tenemos la suerte en Barcelona, de tener el mar cerca y no le damos todo el valor que tiene para nuestra salud. En este articulo te contamos algunos beneficios que puedes obtener de tus visitas a la playa.
¿Sabes qué sucede en tu cuerpo cuando visitas el mar?
Imagínate que estás delante de una playa soleada, con los pies descalzos sobre la arena fina. Simplemente quedándote así ya te estás beneficiando de sus propiedades. Estar en contacto con el aire del mar es como estar delante de un gran pulverizador de olas de iones negativos, es decir, es como un espray bactericida con su alto porcentaje de acidez. Los iones negativos te ayudarán a incrementar tu resistencia a infecciones y purificarán tus vías nasales. Mientras tanto, el sol te estará irradiando en la piel, haciendo que ésta sintetice tu propia vitamina D.
Ahora que ya has llegado a la orilla del mar, los beneficios no hacen mas que aumentar. Primero de todo, tus pies ya han recibido un peeling gratis. A continuación, al sumergirte en el agua fría, tu sistema circulatorio se va a estimular. Vas a notar como tu sangre va a volver a tu corazón más rápido por lo que vas a hacerle un gran favor a tus piernas. Sentirás también cómo tu cuerpo se tonifica al intentar mantenerte a flote con el oleaje. El movimiento mecánico de las olas obliga delicadamente a tus músculos, huesos y articulaciones a fortalecerse.
Después de un ratito no muy largo, notas que ya te apetece salir a calentarte. Será mucho mejor secarte al sol y evitar ducharte con agua dulce inmediatamente para que tu piel pueda acabar de absorber los minerales que se han depositado en ella.
Aunque la mayoría de personas vamos a la playa en verano, darse un chapuzón es mucho más terapéutico en primavera, otoño o incluso a principios de invierno.
Lo mejor de todo es que si solo has disfrutado del clima marino en vacaciones, sus efectos terapéuticos persisten durante un tiempo considerable después de cambiar de lugar.
¿En qué puede ayudarte la talasoterapia?
La talasoterapia o el aprovechamiento del agua del mar tiene muchísimas funciones gracias a que existe una gran similitud entre su composición y la del plasma sanguíneo. Esto permite que se intercambien minerales y toxinas entre tu sangre y el agua a través de tu piel.
– Sistema respiratorio: el ambiente marino es fluidificante y mejorará la rinitis, vegetaciones, sinusitis, etc. Es muy eficaz para la prevención de los procesos gripales y catarrales.
– Sistema cardiovascular: si además caminamos por la playa, amortiguando nuestros pasos gracias a la arena, mejoraremos posibles trastornos circulatorios.
– Aparato genital: mejora la salud del útero ayudando en la esterilidad femenina.
– Sangre: los baños de mar aumentan la concentración de hierro en la sangre.
– Endocrinología: mejora las alteraciones del metabolismo ya que nutre las células y regula el equilibrio ácido básico en el organismo, por eso en casos de obesidad o delgadez extrema es aconsejable. También estimula las glándulas suprarrenales, tiroideas, paratiroideas y sexuales.
– Sistema nervioso: el descanso, el sol, el sonido del mar, el aire, y la temperatura del agua nos devuelven la calma de nuestro estado de ánimo.
– Sistema óseo: la indicación por excelencia de esta terapia es en casos de osteoporosis, raquitismo, recuperación de fracturas y deformaciones óseas.
– Dermatología: especialmente indicada en úlceras de piel, lupus, acné y psoriasis.
¿Cómo sería el baño perfecto?
Consistiría en que te sumergieras en el agua rápidamente (respetando el tiempo de digestión), y nadaras en ella, movieras, ejercitaras el cuerpo. Siempre la notarás fría al entrar pero cuando empieces a sentir escalofríos sabrás que tu cuerpo te está pidiendo que salgas porque ya te has pasado de tiempo. Lo ideal sería no llegar hasta ese punto porque ahí ya no está siendo terapéutico. Es mejor salir y entrar varias veces al agua con actividad para sentir el contraste de frío y calor que no quedarse media hora flotando en el mar.
¿Qué pasaría si te bebieses el agua de mar?
Sería uno de los hábitos más saludables que podrías adquirir en tu vida diaria. El Dr. René Quinton investigó las cualidades del plasma marino a principios del s.XX y comprobó que contiene a los 92 elementos naturalmente presentes en la tabla periódica y, además, en dosis y forma que corresponden a los del medio interno del organismo humano. Simplemente hay que tener en cuenta un truco muy sencillo: diluir ⅓ de agua de mar en ⅔ de agua dulce en un vaso de agua porque si no, tu cuerpo no podrá absorber los minerales que contiene. Si la bebieses en su estado natural, es decir hipertónica, no te hidrataría pero sí que te ayudaría en casos de estreñimiento.
Como puedes comprobar, el agua de mar tiene muchos secretos. Si quieres saber qué más puede hacer por ti y cómo utilizarla en tu caso particular no dudes en visitarnos.
Equipo Nour Mitishamba