A veces, la solución al dolor y molestias tras una operación puede estar en algo tan simple como el color.
Rudi lo descubrió tras someterse a una operación de cataratas.
«Todo salió bien según el doctor, pero ya en casa empezó a aparecer un dolor intermitente en la zona de la ceja que era molesto.»
Recordando la Terapia de Colores me preguntó qué podía hacer para aliviar la incomodidad en su ojo izquierdo recién operado.
Le recomendé dos colores en el reflejo de ese ojo:
- Azul claro en el meñique izquierdo
- Negro en el pulgar
El resultado fue sorprendente, en solo unas horas Rudi ya notó alivio.
Decidió dejar el color por la noche y cuando se despertó,
«las molestias habían desaparecido por completo incluso las del otro ojo que ya llevaba 3 meses operado»
En el vídeo te muestro el testimonio de Rudi y dónde se aplicó el color:
Si quieres descubrir más sobre esta terapia, puedes encontrar mi libro «Bienestar y Salud a través de las Manos: Terapia de Colores y Números» AQUÍ.
A veces, ¡un poquito de color es todo lo que necesitamos!