A lo largo de la vida pasamos por numerosos cambios, el entorno y circunstancias se transforman permanentemente y nosotros también. Nuestro cuerpo, necesidades, emociones y relaciones están en constante evolución. El no saber cómo asumir las nuevas etapas de la vida, como por ejemplo el cambio de un ciclo vital a otro, la pérdida de un ser querido, la ruptura de una relación, un cambio de trabajo, o una enfermedad nos hacen tambalear y volver a encontrar el equilibrio de la vida no es una tarea fácil.
El cambio hace parte de la vida pero aún así y para sentirnos seguros, las personas solemos aferrarnos a la idea de la permanencia, buscamos metas y objetivos creyendo que serán estáticos pero la verdad es que esto nunca sucede, siempre queremos evolucionar más y seguir el proceso de transformación.
«No hay nada permanente, excepto el cambio.» Heráclito.
En este artículo te comparto algunos tips que son esenciales para el proceso de adaptación a los cambios.
1) Identifica y acepta los cambios por los que estás atravesando:
Por lo general solemos pasar por varios cambios a la vez, identificar y aceptar cuáles son los que te están afectando en el momento presente es el primer paso para iniciar el proceso de adaptación al cambio.
2) Has consciencia de cómo te afectan:
De qué manera se ven afectadas las diferentes áreas de tu vida: social, familiar, salud, laboral, emocional y mental.
3) Realiza los cierres necesarios para dar paso a lo nuevo:
Cuando se nos enfrentamos a un cambio importante es muy habitual que aparezca la resistencia al cambio. Elaborar los cierres necesarios para poder adaptarnos a lo que se está transformando es indispensable para pasar a al siguiente etapa. Los cierres te permiten hacer consciencia de los aprendizajes de experiencias pasadas para asumir lo que viene con una nueva perspectiva.
4) Pregúntate a dónde quieres llegar ahora:
Define cuáles son tus nuevas metas y qué estás haciendo para llegar a ellas. Es acá donde se abre la puerta a nuevos hábitos, acciones, personas o experiencias. Es importante no obsesionarse con las metas ya que son tu brújula, te indican cuál es el camino pero la clave está en disfrutar del proceso.
5) Hacerte preguntas relacionadas a cómo te sientes y tus necesidades durante el proceso:
¿Qué emociones genera lo nuevo en mí? ¿Cómo se siente mi cuerpo al atravesar este cambio? ¿Qué creencias limitantes y potenciadoras acompañan este proceso? ¿Qué necesito en este momento? Las prácticas meditativas como el mindfulness o ejercicios de escritura consciente pueden ayudarnos a conectar con nuestro interior y responder así a estas preguntas.
«Las especies que sobreviven no son las más fuertes, ni las más rápidas, ni las más inteligentes; sino aquellas que se adaptan mejor al cambio.» Charles Darwin.
Adentrarse en lo nuevo y adaptarse a los cambios implica salir de la zona de confort por lo cuál es una invitación para cambiar patrones y hábitos no funcionales y poner en práctica los aprendizajes de las etapas anteriores.
Aprovecha los cambios para transformarte con ellos. Que sean un momentos de reflexionar, y cuestionarte buscando las respuestas dentro, en tu interior, que es donde realmente están.
¿Quieres tener herramientas para que tu proceso de adaptación al cambio sea consciente? El Mindfulness es una poderosa práctica que te puede ayudar. En el artículo Mindfulness ¿Qué y para qué sirve? encontrarás algunos unos tips que te pueden servir.