Sabemos que educar a una persona autista no es una tarea fácil. Todas las creencias previas sobre cuándo, qué y cómo enseñarle a un niño dejan de tener validez frente a nuestras diferencias, y padres y maestros se quedan sin premisas sobre las cuales trabajar.
Debes saber que ser autista en un mundo diseñado para neurotípicos tampoco lo es. La educación, la comunicación e incluso los ambientes no están diseñados para la forma en la que funcionan nuestras mentes.