La paz interior. Aquel estado tan buscado por todos.
Nos pasamos la vida buscando, luchando contra lo que sucede y que no nos deja disfrutar de la serenidad que tanto ansiamos. Escondemos nuestras emociones y sentimientos mostrando sólo aquello que es aceptable. ¿Cómo vas a sentir serenidad si no escuchas lo que pasa en tu interior?
Te presento estas 4 claves para lograr tu paz interior:
- Deja de mirar hacia fuera
Esto lo hemos oído mil veces, la felicidad está dentro de uno. Es verdad. No depende de nada externo, solo depende de ti. Nos pasamos el día comparándonos con otros, midiendo nuestra valía en función de lo que la sociedad, nuestra familia y nuestros amigos dicen que es lo debes buscar, tener o lograr. Dale la vuelta a tu mirada y pregúntate qué es lo que quieres tu…qué sientes…qué piensas. Empieza a mirar hacia dentro y afronta todo lo que ha estado apilado durante años y a lo que no le has hecho caso.
- Acepta aquello que surge
Hay cosas que están en tus manos cambiar. Cámbialas. Haz lo que puedas para conseguir aquello que quieres. Lo que no está en tus manos, suéltalo y acepta que no tienes el control. Nos cuesta aceptar aquello que ocurre y está fuera de nuestros planes. ¿Qué quieres sufrir o gozar? Si vas en contra de lo que ocurre, solo logras sufrir. Acepta aquello que viene, porque es lo que hay y haz lo que esté en tu mano para cambiar lo que no te gusta. ¡El resto, acéptalo ya!
- Observa cualquier reacción
Convertirse en un observador de la vida es una forma de aprender cada día y dejar de sufrir para avanzar y evolucionar. Si soy capaz de observar mis reacciones y darme cuenta de las cosas que me afectan o me alteran, aprenderé sobre mi mismo y podré dejar atrás las situaciones que me restan paz interior. Recuerda que el otro solo es un espejo que me hace ver algo dentro de mí.
- Dedícate tiempo con amor
Pasamos la mayor parte del día haciendo cosas para otros y dedicamos poco tiempo a cuidarnos y a mimarnos a nosotros mismos. Si siempre espero que el amor venga de fuera, me puedo llevar muchas decepciones. Si me encargo de darme lo que necesito, no necesitaré a nadie y agradeceré todo lo que se me dé. Pasa tiempo de calidad contigo, leyendo, escuchando música, dándote un baño reparador o haciéndote una buena comida. Si tu te amas y te respetas, los demás te amarán y te respetarán.
Algunas ideas para mejorar nuestro día a día. Si tienes otras y las quieres compartir, estaremos encantadas de escuchar tus aportaciones. Gracias por leernos.
Foto de Tj Holowaychuk en Unsplash