Soy Lola Toledo y, a raíz de la muerte de mi padre a los 14 años, desarrollé la capacidad de resiliencia y superación personal. Lo cual me ha llevado a formarme durante 14 años para encontrar la terapia ideal para recuperar mi fuerza y alegría de vivir. A través del Movimiento Corporal Vital y Expresivo acompaño a mujeres que quieran conectar consigo mismas para encontrar tiempo de autocuidado donde puedan liberarse y trascender aquello que les hace daño. Principalmente, ofrezco una red de apoyo en el Centro «Punto de Encuentro” de Barcelona.
«Sé feliz con quién eres y con lo que haces, y podrás hacer lo que quieras»
(Steve Maraboli)
Lola Toledo eres Terapeuta Corporal Holística especializada en procesos de empoderamiento femenino que ayuda a mujeres a recuperar su autoestima y el placer de vivir a través del cuerpo. Cuéntanos más acerca de los beneficios de tu propio método.
Ayudo a vivir los problemas actuales desde otro lugar alejado del sufrimiento. Esto nos permite liberarnos del rencor del pasado, y sobre todo saber qué es lo que queremos realmente a día de hoy. Socialmente a la mujer se nos pide ser una buena trabajadora, una buena madre, esposa… haciendo que nos olvidemos de quiénes somos y qué queríamos antes de tener estas responsabilidades. El método te ayuda a sentirte poderosa, recuperar la energía para que nos demos prioridad a nosotras.
Lo primero que trabajamos es liberarte de la culpa y de las creencias limitantes que quizá no te hagan sentirte merecedora de conseguir lo que te propongas. Gracias al Trabajo Corporal Vital, puedes recuperar la energía y claridad necesarias para llevar a cabo lo que es bueno para ti, dejando atrás lo que ya no quieres. A través del movimiento corporal expresivo puedes contactar con la alegría de vivir y liberarte de los miedos que te impiden avanzar, así como de esas ideas que te limitan.
Sientes que es necesario que las mujeres tejamos redes de apoyo. ¿A quién le recomiendas formar parte de tu red de apoyo?
Invierto mucha energía en ayudar a mujeres que tienen resistencias a la terapia individual. Es por ello que ofrezco talleres con un abordaje corporal desde la alegría y el juego. En el Trabajo Corporal Vital se liberan tensiones, emociones trabadas en el cuerpo y eso ayuda conectar con la fuerza, el bienestar y el buen funcionamiento del organismo, mejorando la autoestima.
Al colectivo de personas que sufren de dolor crónico (menstruaciones dolorosas, fibromialgia…) porque con el trabajo corporal se flexibilizan las tensiones crónicas en forma de determinadas posturas, contribuyendo a mejorar la postura corporal.
También les recomiendo unirse a las mujeres con trastornos con la comida y con problemas con su autoimagen. Así como personas que han sufrido una pérdida traumática en su entorno y todavía no han encontrado el sentido y alegría de su vida.
¿Qué servicios ofreces a las mujeres que necesitan recuperar la alegría y energía vital?
A nivel grupal ofrezco dos talleres. El primero de Empoderamiento Femenino donde desde el goce, el juego y la flexibilización del cuerpo, desarrollamos la conciencia corporal y fomentamos el autocuidado y el autoapoyo. Aprendemos a poner límites de forma amorosa y asertiva y nos liberamos de aquello que nos impide ir hacia lo que queremos. El segundo, los talleres de Alimentación Consciente: con el apoyo del Mindfulness, las técnicas corporales y el coach aprendemos a poder disfrutar de la comida y a reconocer cuándo estamos realmente saciadas. Aprenderás a cuidar y a escuchar tu cuerpo. El resultado es perder el peso que te sobra de forma orgánica y respetuosa, en cuanto tu cuerpo se libere de la sensación de culpa y se relaje.
Por otro lado, ofrezco la terapia individual para ayudar en la superación de estados de tristeza, desesperanza y malestar corporal general como: la muerte de un ser querido o rupturas difíciles/dolorosas. Acompaño a personas a que puedan sostenerse y transitar situaciones en las que no se has sentido apoyada, como situaciones de injusticia, rechazo o humillación. Por último, acompaño en la gestión emocional de procesos personales en los que el paciente tiene que transitar el dolor y/o la rabia. A través de la expresión y liberación no sólo a nivel verbal, sino corporal; lo que refuerza y potencia el impacto de la terapia. El proceso de sanación se acompañan con el aprendizaje a amar/se: aceptar/se y perdonar/se.
Para conocerte con más detalle, ¿cómo es una sesión contigo, Lola Toledo?
Mis sesiones de terapia individual son generalmente de una hora y media. Considero que es el tiempo adecuado para que la paciente salga reconfortada y pudiendo cerrar los temas que se trabajan. Entre paciente y paciente siempre me dejo un tiempo de descanso. Esto garantiza dedicarme al paciente de forma completa, estando en total presencia. Hago un tratamiento personalizado con las técnicas y procedimientos que necesite el paciente, teniendo en cuenta todos los niveles (desde lo más puramente corporal y energético hasta la integración y comprensión más propiamente mental). Normalmente doy “deberes” para casa en forma de actividades corporales, meditaciones, escribir, rituales…
Mi objetivo es que la persona se sienta escuchada y entendida en su singularidad: que pueda abrirse hasta dónde esté preparada, en un espacio de completa seguridad. Si lo desea podrá liberarse de aquellas cargas que le impiden avanzar de forma sana. Y podrá hallar los recursos que están en ella para enfrentarse al problema que le aqueja.
El trabajo que ofreces como Terapeuta Corporal Holística, es fruto de una búsqueda de ti misma. ¿Cuál ha sido la experiencia personal que más impacto ha tenido en ti?
El suicidio de mi padre cuando tenía 14 años. Como podéis imaginar, causa un enorme impacto perder a alguien que se ama de esta manera; no en vano, a personas que hemos pasado por esta experiencia, se nos denomina “supervivientes”. En mi caso, al principio, no pude ni llorar, me quedé en shock. Ahora lo sé. Al principio no elaboré el duelo de forma sana, porque me dediqué a ocultarlo y me comporté como si no hubiera pasado. Tenía miedo de que me señalaran con el dedo y no quería que sintieran lástima por mí. Había y sigue habiendo mucho tabú todavía con el tema de la muerte. Siempre me había gustado escribir y acabé estudiando filología porque quería contar la historia de mi padre al mundo, la historia de una presunta falsa acusación relacionada con abusos sexuales a una menor. Finalmente nunca escribí esta historia, al principio, porque me volqué en mis estudios, que se convirtieron en una forma de evasión y, en parte, en mi tabla de salvación. De los 20 a los 30 años, me dediqué en cuerpo y alma a forjarme una excelente carrera profesional: viajé mucho, viví en diferentes países, entre ellos, Estados Unidos, pero realmente no me cuidé. En esos momentos estaba teniendo una mala relación con la comida. Estaba convencida de que conseguir lo que me había propuesto profesionalmente en la vida me daría la felicidad, al menos, eso era lo que me habían vendido en mi entorno. Sin embargo, me di cuenta de que en parte había sido una huida hacia delante, para no sentir ese gran vacío que tenía en mi interior.
Cerca de los 30 años empecé mi proceso terapéutico de forma seria para enfrentarme al dolor, y poder asimilar todo lo que había pasado. Pedí ayuda profesional por primera vez y me comprometí con mi trastorno de alimentación, el cual superé gradualmente gracias a liberar el pasado, aprender a amarme a mí misma de verdad y a perdonar y perdonarme.
Pese a que nunca escribí ese libro, sí que indagué sobre la verdad de lo ocurrido y no he parado de aprender sobre la psicología humana y sobre el impacto del trauma/abuso en el cuerpo. El mundo terapéutico se ha convertido en mi gran pasión, la cual ha venido acompañada del desarrollo de mi capacidad de resiliencia o superación de conflictos graves o heridas emocionales. Y doy las gracias a lo que pasó con mi padre porque eso me ha hecho mejor persona y ha hecho que quiera acompañar a otras personas.
Una persona que ha experimentado la muerte de su padre con 14 años experimenta la fuerza interior en sus propia piel durante mucho tiempo. ¿Qué es la fuerza interior para ti?
Conectar contigo mismo: con tu fuerza, con tu cuerpo y con tu propósito de vida. Si te aceptas y perdonas, puedes hacer lo que quieras en la vida. Es precisamente esto lo que trabajo en mis talleres de empoderamiento femenino. La variedad de formaciones terapéuticas que he realizado responden, en primer lugar, a la búsqueda de respuesta y de superación de las principales heridas de mi vida.
Esta fuerza interior viene precedida de las formaciones terapéuticas que has realizado con tal de responder a la búsqueda de preguntas y superar tus heridas. Háblanos de las técnicas que utilizas para lograr que las mujeres transiten el dolor y rabia para que aprendan a quererse, aceptarse y perdonarse.
He dedicado más de 10 años de mi vida a formarme, aprendiendo y explorando en primera persona una variada gama de terapias y técnicas diversas (Terapia Corporal Integrativa, Terapia Gestalt, Diálogos del Cuerpo Gestálticos, el proceso SAT de Claudio Naranjo, Constelaciones Familiares, Mindfulness, Sexualidad Femenina con Mireia Darder, PNL, Reiki y Qigong). Podría escribir un libro sobre ello :), finalmente he decidido crear un método propio con lo que realmente me ha funcionado a mí y de acuerdo a una visión holística del ser humano: El Trabajo Corporal Vital. Se trata de técnicas psicocorporales y energéticas. Por un lado se sustentan en la Terapia Corporal y Gestáltica (la Bionergética, el trabajo de liberación de las “corazas musculares” o tensiones musculares crónicas, y el movimiento expresivo: el baile, el juego y la dramatización que permiten contactar con la creatividad y vitalidad natural del cuerpo) y, por otro, la práctica de la atención plena o Mindfulness (con diferentes tipos de meditaciones que permiten liberarnos de los bloqueos a que nos puede someter la mente). Además tengo en cuenta cómo afecta en los conflictos la dimensión transgeneracional (nuestros ancestros) y puedo trabajar con Constelaciones Familiares con muñecos y con el árbol transgeneracional.
Todo esto enmarcado dentro de las últimas investigaciones sobre el trauma y la relación que tiene con el cuerpo (Bessel Van der Kolk y Peter Levin) y abuso sexual y sexualidad femenina (a través de la formación de Mireia Darder). Las ayudo a darse cuenta de lo que las ha llevado al estado en el que se encuentran y las guío a salir de ahí, facilitándoles herramientas prácticas que tienen en cuenta el cuerpo y la mente. Este trabajo ayuda a desarrollar la confianza en una misma y a sentirte más autónoma y a amarte más a ti misma.
Para terminar, ¿qué aprendizaje destacas de tu proceso de Crecimiento Personal?
Que la mayor sabiduría está en una misma y no exclusivamente en una forma de terapia u otra. Realmente, creo en la autoregulación de una misma con el adecuado acompañamiento. De hecho el cuerpo ya tiende a la homeostasis o recuperación del equilibrio, lo que explica fenómenos como la compensación de las desviaciones de la columna vertebral. Si te das el tiempo y el cuidado necesario, tú sabes lo que realmente necesitas para ser feliz y qué te lo imposibilita. Para mí, la función del verdadero terapeuta es acompañar a las personas a conectar consigo mismas y apoyarlas en ese camino. Conectar contigo significa darte un tiempo de autocuidado diario, donde puedes liberarte y trascender aquello que te hace daño. Conectar con tu intuición y tu cuerpo, él te guiará y te dirá cuál es el mejor camino para ti.
Un comentario
Lola es genial! Te transmite mucha energía y positividad. Me enseño diferentes recursos de sus métodos en Mindfulness e hicimos una meditación guiada.
Muy recomendable!!