- Las frutas son el mejor alimento y el más completo para nosotros. Comerlas a menudo, en más cantidad y respetando las combinaciones, es un hábito que conlleva inmensos beneficios:
- Nos proporcionan la totalidad de los nutrientes necesarios para el correcto funcionamiento del cuerpo. El resultado es que la salud mejora.
- Proporcionan energía rápidamente a todas nuestras células, órganos, sistema muscular, sistema central, cerebro, etc. Nos sentimos con más fuerza y ganas de vivir.
- No necesitan apenas digestión, por lo que son absorbidas y asimiladas en cuestión de minutos no gastando apenas energía en este proceso. Tras una comida de frutas podemos irnos a trabajar tranquilamente; podemos, tras unos minutos, hacer deporte; en cambio, las personas que hacen comidas cárnicas y convencionales se sienten muy cansadas y sin ganas de hacer nada.
- Tienen una gran abundancia de agua pura satisfaciendo la sed. En cambio, con la comida convencional, las personas beben agua durante la comida y otro tipo de bebidas, perjudicando notablemente la digestión de los alimentos. El agua de las frutas, el cuerpo la utiliza para muchísimas funciones. Estamos formados por más del 60% de agua.
- No necesitan ser cocinadas; crudas saben mejor y conservan todos sus nutrientes. La comida cocinada ha perdido todos sus nutrientes, es alimento muerto, desnutrido.
- También mejora nuestra economía, pues el precio de las frutas es más económico que el de otros “alimentos”.
- Las frutas se conservan muy bien y durante bastante tiempo.
- Convertir las frutas en tu alimento principal conlleva a ayudar a la conservación del planeta Tierra. Anualmente son sacrificados miles de millones de animales en todo el mundo. Alimentar a estos animales, sacrificarlos, envasar su carne y distribuirla conlleva un gasto enorme de agua, de energía, de árboles, de vegetación, de alimentos.
- Si la mayoría de la gente comiera más frutas, más verduras, habría más árboles, más oxígeno, el sacrificio de los animales disminuiría notablemente y la muerte en el mundo por hambre disminuiría e incluso podría desaparecer.