¿Qué te mueve a actuar?
Cada uno de nosotros tiene una forma particular de percibir la realidad, muchas veces diferente a la de los demás, y por lo tanto una misma noticia puede afectarnos positiva o negativamente a cada uno de nosotros, simplemente porque las percibimos de manera diferente.
El psicólogo estadounidense Taibi Kahler a fines de la década de 1970, observó que existen un tipo de creencias positivas en apariencia, que pero de hecho son limitantes. A estas creencias limitantes las llamó impulsores o “Drivers” .
Una creencia es un pensamiento, un juicio profundamente arraigado que se ha construido a través de las experiencias personales, vividas o no, y que forma parte de la historia personal de cada individuo. Las creencias a veces nos limitan, actúan como filtros en nuestra percepción del mundo, y por esto pueden apoyar o sabotear nuestras acciones y nuestra vida.
Taibi Kahler, identificó cinco Impulsores Internos que nos dirigen hacia a la acción de una manera rígida y no adaptada a la situación. Ser consciente de nuestras creencias puede ayudarnos a tomar las riendas de lo que nos sucede y permitirnos elegir la manera en que realmente queremos actuar.
Los cinco Impulsore Internos :
- Sé perfecto
- Sé Fuerte
- Complace
- Date Prisa
- Esfuérzate CÓMO SE ACTÚA DESDE LOS IMPULSOR
Sé Perfecto: Me esfuerzo en hacerlo todo bien. Nunca estoy satisfecho/a con los resultados. Deberían valorar más mis logros. No me gusta correr riesgos. Mantengo siempre los mismos hábitos.
Sé Fuerte: No me gusta descubrir mis sentimientos. Intento abarcar todo aunque perjudique a mi salud. Tengo confianza en mí mismo/a. No me gusta depender de nadie. La sensibilidad es un signo de debilidad
Complace: Necesito agradar a los demás. Evito las tensiones con los demás. Intento ayudar a los demás aunque no tenga ganas. Intento no contradecir a los demás. En una discusión trato siempre de evitar el enfrentamiento directo.
Date Prisa: Me adelanto a los acontecimientos. Hablo apresuradamente. Actúo con rapidez. No aguanto la lentitud de los demás. Soy algo intranquilo/a.
Esfuérzate: No debo conformarme con mediocridades. Me planteo objetivos muy ambiciosos, en muchos casos, poco realistas. Me voy de un tema a otro. No suelo estar conforme con lo que he hecho. Me gusta ser cortés con los demás.
¿Con cuál o cuáles te identificas tú?
Lo más interesante es que para evitar que los impulsores controlen nuestra vida, podemos utilizar creencias que, al contrario que los impulsores, pueden apoyar nuestras acciones y nuestra vida.
En concluión, es importante que seamos conscientes del tipo de diálogo interno que mantenemos habitualmente con nosotros mismos. Que nuestras actitudes sean respetuosas y flexibles que nos ayuden a afrontar los retos y las dificultades de cada día. Ser amables y comprensivos con nosotros nos ayudará a ser más felices. Cuando uno se aferra a una idea de forma inflexible eso puede generarnos malestar por eso debemos revisar nuestros impulsores.
El Coaching nos brinda la herramienta para reconocer nuestros propios impulsores internos e identificar de qué modo estas creencias nos limitan. Si lo quieres trabajar y saber más a fondo, lo puedes hacer en sessión conmigo.