La palabra sepsis o septicemia puede ser desconocida para muchas personas, sin embargo reconocer sus síntomas y actuar rápidamente nos puede salvar la vida.
La septicemia es la respuesta extrema del cuerpo a una infección. Es potencialmente mortal, y sin tratamiento a tiempo, puede rápidamente causar daños en los tejidos, insuficiencia orgánica y la muerte.
Los casos de septicemia ocurren con mucha más frecuencia de la que creeríamos, y van en aumento.
En los países más desarrollados, la sepsis aumenta en una proporción anual de entre 8-13%, y cada año la sufren en España 50.000 personas, de las que fallecen 17.000 enfermos, una cifra muy superior a los fallecidos por infarto de miocardio o accidente de tráfico.
En los últimos días ha salido en las noticias el caso de una chica de 34 años, Silvia Idalia Serrano, que gozaba de muy buena salud y que tras una triple operación de cirugía estética ha terminado en coma con un shock séptico.
El shock o choque séptico es la etapa más grave de la sepsis (o septicemia), que es la respuesta extrema del cuerpo a una infección, potencialmente mortal cuando la respuesta del cuerpo lesiona sus propios tejidos y órganos.
Llama la atención que Silvia presentara síntomas tras la intervención que podían ser indicadores de una sepsis, y que requerirían atención médica inmediata, pero los médicos que la vieron no le dieron importancia.
Y eso que entre las posibles causas de una sepsis se indica ¡Cirugía o intervención quirúrgica reciente!
A continuación el proceso de lo que ocurrió, según familiares de Silvia, desde la intervención el 29 de abril en el Hospital VOT de Madrid, un centro privado donde opera la clínica CEME de Madrid, hasta que ingresa en el hospital La Paz, donde llega prácticamente muerta, con un choque séptico muy extendido. Silvia está ahora en coma inducido.
- Al día siguiente de la intervención, se le da el alta médica “a pesar de que se queja de fuertes dolores y de haber pasado una muy mala noche”.
- Durante los seis días siguientes, Silvia se comunica en múltiples ocasiones con la clínica y les relata que tiene fuertes dolores, fiebre, mareos, vómitos, desmayos. El doctor Arévalo, su cirujano, apunta que “todo entra dentro de la normalidad” en un proceso de recuperación tras una intervención importante como la practicada.
- Desde que recibe el alta, Silvia y su pareja visitan en dos ocasiones el Hospital Pío XII, el centro donde CEME gestiona las urgencias postoperatorias. Allí, aseguran a la paciente que no hay motivo para preocuparse, que lo que tiene que hacer es comer.
- En la tercera visita a este hospital, Silvia llega casi muerta con un shock séptico, y es trasladada hasta el hospital La Paz.
Ante estos hechos, los familiares de Silvia indican una posible negligencia y un mal seguimiento postoperatorio.
Cómo reconocer una Sepsis
El artículo «Cómo reconocer los síntomas de la septicemia», señala que,
Los síntomas de la septicemia pueden confundirse con otros procesos infecciosos; sin embargo, esta afección a menudo empeora rápidamente y es causada por una infección, como una herida cutánea, infección del tracto urinario o infección intestinal.
Según el artículo «Diferencia entre la sepsis y el shock séptico», los primeros signos y síntomas de la sepsis se caracterizan por:
- Fiebre alta con escalofríos y rigores.
- Taquicardia (ritmo cardíaco acelerado)
- Taquipnea (respiración rápida)
- Hipotensión (caída significativa en la presión arterial)
- Desmayos o mareos
- Confusión y desorientación.
- Náuseas, vómitos y diarrea.
- Habla confusa
- Falta de aliento severa
- Reducción de la producción de orina.
- Piel fría y húmeda.
- Pérdida de consciencia
Es desafortunado lo que le ha pasado a esta chica, y mucho más desafortunado que éste no sea un caso aislado, sino que ocurre mucho más frecuentemente de lo que pensamos.
En el artículo «¿Qué es el shock séptico?», se indica que,
En lo que respecta a la etiología del shock séptico, los bacilos gramnegativos adquiridos en el hospital y los cocos grampositivos son los patógenos más comunes, mientras que Candida y los hongos rara vez pueden identificarse en ciertos individuos con inmunosupresión severa.
También es importante buscar cualquier signo de infección profunda o superficial (tracto gastrointestinal, urinario o biliar), especialmente en pacientes que se hayan sometido recientemente a una cirugía.
Si toda cirugía entraña un riesgo, y las condiciones de un hospital pueden aumentar ese riesgo, creo que es necesario que se deje de ser «paciente» ante ciertas situaciones, que sabemos que no encajan pero esperamos si el médico dice que no pasa nada, que hay que esperar.
Tratamientos
Los antibióticos suelen ser el tratamiento principal ante una sepsis. Sin embargo, este tratamiento es un desafio considerable, ya que disminuye su efecto a medida que prevalecen las infecciones resistentes a los antibióticos.
Parece necesario investigar tratamientos más eficaces.
En el artículo «Cómo reconocer los síntomas de la septicemia», se indica que el Dr. Paul Marik, jefe de medicina pulmonar y de cuidados críticos en el Hospital General Sentara Norfolk en el este de Virginia, Estados Unidos, analiza un protocolo de tratamiento exitoso que logró desarrollar.
El estudio clínico retrospectivo de Marik publicado en la revista Chest, demostró que al administrar vitamina C con hidrocortisona y tiamina (vitamina B1) por vía intravenosa a los pacientes durante dos días, redujo la mortalidad casi cinco veces, de un 40 % del grupo de control con un tratamiento estándar hasta un 8.5 % del grupo experimental.
Desarrollar un tratamiento efectivo podría generar miles de millones de dólares. Sin embargo, en este caso, las ganancias no son el motivo, ya que los costos de los ingredientes son tan pequeños como una dosis única de antibiótico.
…El aumento de la resistencia a los antibióticos es una amenaza importante para la salud pública a nivel mundial y la causa principal de esta epidemia provocada por el hombre es el uso indebido de antibióticos. Su exposición al uso excesivo de antibióticos no solo se debe a las consultas médicas, sino también a la producción de alimentos.
Me parece muy importante ser conscientes que el factor tiempo es fundamental en un caso de infección donde podamos reconocer algunos de los síntomas de una sepsis, incluso si no sabemos que hay infección, como pueden ser: fiebre elevada, disminución de la producción de orina, aceleración del ritmo cardíaco y la respiración, erupción cutánea, dolor muscular intenso, confusión, desorientación, mareos.
Y sobre todo, saber que hay un tratamiento que ha demostrado ser mucho más efectivo que el habitual de antibióticos.
Aunque la confianza en el médico, o en el cirujano ante una intervención quirúrgica, es de suma importancia, también lo es confiar en qué nos dice nuestro cuerpo, confiar en nuestra intuición. Al fin y al cabo, es nuestra vida, es nuestra salud lo que está en juego, y es demasiado importante para dejarla 100% en otras manos y opiniones.